8/11/11

Entre las nubes y el bosque

Sin protocolo el izamiento de la bandera nacional


La visita al Parque Nacional El Ávila, ahora denominado Wuaraira Repano, fue disfrutada al máximo de principio a fin, el ascenso y especialmente el disfrutar la naturaleza a medida que las cotas se hacían mayores en las copas de los árboles; calculando su altura y edades y ellos firmes haciendo su trabajo de pulmón verde a la gran ciudad.

Ya en la estación final la visita cotidiana al hotel, pasear por los distintos parajes con exposiciones y ventas de artesanías, la música un poco alta para el sitio, los zanqueros, mimos y la creatividad de los dueños de negocios para mercadear sus productos como los del kiosko que ofrecía "deleitables cahapas & special sandwiches de pernil".

Parte de este ascenso incluye el traslado en rústicos hasta el paseo turístico de Galipán, donde la oferta de duraznos, artesanías, dulces, flores y comidas es innumerable, en tienditas arregladas bien bonitas de construcción similar y pequeñitas. La degustación en esta zona incluyó: cachapas con queso, sopa de pollo y  parrilla (pernil, salchichas y bollitos de maíz) con sus respectivos jugos en la casa de Mi Tía.